Ivanna, paseador de perros en Pontevedra

Tengo mascotas desde los 5 años. He tenido 10 gatos y 8 perros.
Esas experiencias cuidando a mis mascotas me mostró que no todos los perros, ni todos los gatos, son iguales.
Por ejemplo, tuve un Pastor Alemán que era muy inteligente y protector. Necesitaba mucho ejercicio, y que le impusiéramos nuestro liderazgo para que no nos desobedeciera. En cuanto a higiene y cuidados, hay que cepillarlo con relativa frecuencia, más en verano cuando mudan el pelaje.
También tuve una Mastín Napolitano, que era bastante temperamental y no se llevaba bien con otros perros, pero se notaba su amor por nosotros. Hay que tenerles paciencia (sobretodo con su baba) y también hay que imponer liderazgo.
Mi última experiencia con perros de raza fue con una Doberman. A pesar de su mala fama, debe haber sido de los perros más cariñosos que he tenido. También necesitaba mucha actividad física, y atención de nuestra parte. Era muy celosa con otros perros cuando se acercaban a nosotros, por lo que debíamos tener esto en cuenta si la sacabamos a caminar.
El resto de mis perros no fueron de raza, aunque cada uno tenía una "personalidad" única. Todos eran muy cariñosos, algunos requerían cuidados adicionales y otros solo necesitaban ejercicio y mimos.
En cuanto a los gatos, hay que saber darles su espacio sí lo necesitan y no sofocarlos con mimos si no lo quieren.
Tuve una gata de pelo largo que necesitaba cepillado al menos dos veces por semana.
Tuve dos siameses que fueron los gatos más distintos al resto. Muy frioleros, y constantemente cerca nuestro. Detestaban quedar solos por más de unas horas.
Tengo claro que hay que tener todo esto presente a la hora de cuidar animales. Ya que no será lo mismo cuidar o sacar a caminar a un perro grande y dominante, que a un perro más pequeño y manso. Con los primeros, al sacarlos a caminar, hay que llevarlos siempre a tu lado y no dejar que tiren de la correa, así muestras que tú estás al mando.
Y lo mismo sucede con el cuidado de gatos. Cada gato es un mundo.